El martes 7 de marzo de 2017 por la noche, ingresamos a nuestra cabina tras detectar que la transmisión de radio no estaba sonando. Lo primero que nuestros ojos vieron fue el derrumbe de un espacio que tenía solamente once meses de haberse estrenado. Aquel día de re-inauguración -el 10 de abril de 2016- dijimos: “Hoy resurgimos, gritando más fuerte que nunca que no nos van a callar”. No eran solamente palabras.
Hoy, al ver que nuestra segunda casa fue desmantelada y totalmente saqueada, volteamos a ver nuestra historia, sacamos las calculadoras solo para confirmarlo: Hemos perdido la cuenta de los daños, la cantidad de veces que nuestros ojos miran derrumbarse trabajos en que habías dejado un pedacito de corazón y mucho mucho esfuerzo, cuando miras el equipo destruido o ausente, el labio roto, el ojo morado o el colapso del compañero que defendió con su vida una colectividad; después las secuelas.
Por el contrario, hemos perdido la cuenta de una manera magnífica: de los oídos y ojos atentos, el abrazo compañero, las voces alentadoras, las manos dispuestas: la solidaridad, esa que hoy nos atrevemos a decir, sin resquemor, es el corazón latiente de Regeneración Radio.
Porque Regeneración Radio no es una locutora fría y robotizada detrás de un micrófono, ni un reportero indolente apretando el obturador de la cámara sistemáticamente. Regeneración Radio es el precio de no ser un engrane más en un sistema de muerte que no funciona, el precio de no querer ser el caprichoso juguete del capitalista.
Es por todo esto que hoy nos atrevemos nuevamente a pedir su solidaridad para reconstruir este espacio, porque sabemos que somos el resultado de quienes en cada caída se han levantado con nosotr@s. Porque aún cuando en 2015 casi nos asesinan, sobrevivimos gracias a ustedes.
A veces es cansado, a veces llegan al imaginario esos tentadores pasos en reversa. Después aparecen -como una bofetada bien puesta y a tiempo- los dolores de todo un pueblo, que nos hacen recordar por qué empezamos, por qué seguimos aquí, por qué no queremos -ni podemos, ni debemos- dar marcha atrás. Es doloroso, es cierto, pero nos sabremos?regenerar?para seguir susurrando, cantando y gritando: #ComunicaciónContraElPoder.
Regeneración Radio
Dejamos la siguiente cuenta bancaria donde recibiremos el apoyo que se destinara a la reposición de los aparatos robados.
HSBC
Número de cuenta: 6446897369
Clabe: 021180064468973698
Titular: Sandra Suaste