San Cristóbal de las Casas, Chiapas; 3 de febrero. El 9 de diciembre del 2015, grupos partidistas del PRI, religiosos del protestantismo, así como personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) acudieron a casas de 9 familias de la comunidad de Shulvó, del Municipio de Zinacantán, Chiapas, intimidando a las mujeres, hombres y menores, todos adherentes a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona. Ese día les cortaron los suministros de agua y electricidad, quitaron los medios de comunicación (teléfonos) y destruyeron buena parte de sus bienes inmuebles. Fueron amenazados con ser “colgados y desaparecidos”, por ser simpatizantes zapatistas y adherentes a la sexta, y “porque el gobierno no quiere gente organizada”.
Hoy se movilizaron en San Cristóbal de las Casas, terminaron en la explanada de la Catedral con un plantón indefinido, hasta que se resuelva el retorno seguro a su comunidad. A través de un megáfono denunciaron que su desplazamiento es “parte del plan represivo desde el mando único castrense diseñado para generar el terror y desarticular a las organizaciones del pueblo, donde sus reformas neoliberales son en beneficio de los grandes ricos, arrojando a la miseria a la gente pobre, al mismo tiempo que impulsan proyectos económicos a las comunidades con el objetivo de dividirlas”.
Exigen el retorno de las familias desplazadas, reparación total de los daños ocasionados y Castigo a los responsables de los desplazamientos forzados.