El Día Internacional de los Trabajadores o Primero de Mayo, es la fiesta por antonomasia del movimiento obrero mundial. Es una jornada que se ha utilizado habitualmente para realizar diferentes reivindicaciones sociales y laborales.
Desde su establecimiento en la mayoría de países (aunque la consideración de día festivo fue en muchos casos tardía) por acuerdo del Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional, celebrado en París en 1889, es una jornada de lucha reivindicativa y de homenaje a los Mártires de Chicago. Estos sindicalistas anarquistas fueron ejecutados en Estados Unidos por su participación en las jornadas de lucha por la consecución de la jornada laboral de ocho horas, que tuvieron su origen en la huelga iniciada el 1 de mayo de 1886 y su punto álgido tres días más tarde, el 4 de mayo, en la Revuelta de Haymarket. En la actualidad es una fiesta reivindicativa de los derechos de los trabajadores en sentido general, y se celebra en muchos países.
Como cada año salen miles de trabajadorxs a las calles, en esta marcha encontramos aglutinados sindicatos de derecha, centro e izquierda, algunos convocados por cuenta propia otros obligados a marchar, si bien, es cierto el grueso de la población son los trabajadores y de ella tendría que emanar la lucha para la transformación social, pero actualmente vivimos una crisis capitalista y de esta misma manera del proletariado, pues la aguda sistematización de nuevas reformas han hecho que el trabajador vaya perdiendo sus derechos y garantías laborales.
Este primero de mayo decidimos marchar con las y los compañeras de Brigada Callejera “Elisa Martínez” de apoyo a la mujer A.C, partieron a las nueve de la mañana de su local ubicado en la calle Corregidora en la colonia Centro, docenas de ellas salieron con la frente en alto, con antifaces y pancartas denunciando este mal gobierno, en ellas reclamaban dignidad, trabajo y respeto.
Entre zapatillas, colores y rabia paso a paso, llamaban la atención de los transeúntes, pues muchos de ellos no logran situar al trabajo sexual, como parte de la clase trabajadora, por todo lo contrario se minimiza a solo ser “Putas” o “prostitutas”.
Brigada callejera es un espacio de apoyo a los mujeres que laboran sexualmente, ahí se les proporciona asistencia médica, ginecológica, dental, acupuntura entre otras cosas, ellas han logrado tener su marca propia de condón llamada “Encanto” que tiene el precio aproximado de 2 pesos, así garantizan que en cualquier momento podrán acceder a él.
Con firmeza arribaron al zócalo capitalino realizando un mitin para ratificar su lucha y denunciar las políticas de mal gobierno, algunas de estas son: la supuesta regularización del trabajo sexual en las calles, los falsos apoyos en salud, educación y empleo que el gobierno les quiere otorgar, como la credencialización de salud, que lo único que busca es controlar la población laboral sexual; pero no solo pasa en el DF, ahora se agudizado en otros estados como Guadalajara, Puebla o ciudades como Cancún. Para ellxs y nosotrxs es importante reivindicar el trabajo sexual y garantizar que cada unx de ellxs cuente con los servicios necesarios, además de eliminar la falsa idea que ellas solo son “prostitutas”, pues es un gran error, ellas son mujeres y hombres que trabajan como cualquiera de nosotrxs y que la única diferencia es que utilizar la rama sexual para desempeñar su trabajo.
Palabras durante la marcha de lxs compas de Brigada Callejera de apoyo a la mujer Elisa Martínez
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Otra marcha que decidimos acompañar fue la que realizaron compañeros maestros del estado de Guerrero de la Coordinadora Estatal de trabajadores de la Educación de Guerrero. Partieron de la glorieta de la Diana Cazadora, cientos de ellos marcharon rumbo al zócalo capitalino para denunciar los hechos acontecidos en las semanas pasadas donde el gobierno Federal con sus fuerzas armadas atacaron de manera brutal, así como ratificar sus demandas como el repudio a la reforma educativa, la creación del Instituto de Evaluación Educativa de Guerrero y garantizar a egresados de las Escuelas Normales de la entidad el acceso a plazas laborales, entre otras a pesar de que el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero mencionó que estas demandas son inviables para que el Congreso estatal las apruebe.
