“Yo creo que es Ebrard”: trabajadora sexual.
LOS ASESINATOS DE TRABAJADORAS SEXUALES
* Las autoridades siempre están involucradas
* Generados por planes del gobierno capitalino
Por taller de periodismo “Aquiles Baeza”, México D.F., 1 de junio.- Existe preocupación y desconcierto entre trabajadoras sexuales, por los últimos asesinatos de sus compañeras. Estos han ocurrido en hoteles y zonas de la Merced, Tlalpan y Buenavista, lugares donde se ejerce esta actividad.
Juana, trabajadora sexual con más de 30 años en este oficio, comenta que la falta de seguridad al estar “taloneando”, el incremento de la delincuencia y los planes del Gobierno del Distrito Federal de “terminar con nosotras”, ha generado los homicidios de varias mujeres.
“Las autoridades siempre están involucradas en los asesinatos de las trabajadoras sexuales, porque no quieren que salga a la luz la prostitución infantil de niñas y niños. Siempre nos han agredido y cuando les molesta algo, nos golpean y asesinan”, asegura María y concluye, “Yo creo que es Marcelo Ebrard”.
Maricela, trabajadora sexual de la Merced, señaló que los homicidios de sus iguales no se han resuelto, porque según ella, “somos putas y no les importamos”. Celia, trabajadora sexual de la Merced, denunció que “las autoridades son las mismas que nos han mandado a reprimir”. Lupita de Buenavista, indicó que “van como cuatro muertas por inseguridad y nadie hace nada al respecto.”
Paloma, trabajadora sexual transgénero, mencionó que ha sido asaltada y agredida en Tlalpan. “Varias veces me han apedreado, ya denunciamos con los policías que pasan pero no hacen caso”. Por su parte Ramira, acusó: “ya que son presentados los agresores ante las autoridades, sólo son castigados por faltas administrativas”.
“Para que no nos maten, tenemos que seguir luchando por nuestra seguridad, apuntar el número de placas del carro en que nos vamos, cuidarnos entre nosotras, hacer las denuncias aunque las autoridades no hagan nada”, puntualizó Jennifer.
Año 2010: el año del miedo de la clase política mexicana.