“Desgraciadamente, los que consideran que el 68 mundial fue, antes que nada, un happening cultural siguen hablando, actuando y pensando como si no hubieran pasado ya 40 años…por eso, para mí, ese movimiento tiene sentido recordarlo en función de la lucha actual: de Atenco, Oaxaca y Chiapas, de la huelga del CGH, de lo que día con día, los jóvenes de ahora construyen y edifican, y no como acto de autocomplacencia…”
El pasado 2 de octubre se evidencio en Mexico una estrategia represiva gubernamental hacia la manifestación por los 41 años del movimiento estudiantil de 1968. Esta ofensiva fue posible gracias a la articulación de los medios masivos de comunicación, de grupos infiltrados en la marcha y de las fuerzas de la Secretaria de Seguridad Publica del Gobierno perredista del Distrito Federal. Entre los objetivos se encuentran: a) Que la sociedad mexicana olvide lo que sucedió el 2 de octubre de 1968 y cesen las demandas de justicia. b) Desprestigio al movimiento social actual y legitimar la violencia en contra de este y c) Detención de activistas para poner en una dinámica defensiva a sus organizaciones. En el articulo analizamos lo que sucedió en la marcha, la estrategia coordinada, sus objetivos y algunas reflexiones al respecto.