A todos los medios de comunicación.
Al Congreso Nacional Indígena.
A las organizaciones sociales.
A la opinión pública.
Pueblo en general.
Ante la farsa y el montaje del procurador José Murillo Karam de intentar darle carpetazo al delicado asunto de los desaparecidos de la normal rural “Raúl isidro burgos” de Ayotzinapa, guerrero, la respuesta de los familiares y compañeros de los normalistas fue tajante: que el gobierno de Enrique Peña Nieto tome en serio su papel y cumpla de inmediato con las demandas urgentes de presentación con vida de los 43 alumnos de la normal de Ayotzinapa.
Razón por la cual las acciones que se emprenderán serán cada vez más enérgicas y contundentes hasta que los estudiantes aparezcan con vida. El sábado 8 de noviembre la indignación creció hasta el límite de incendiar vehículos de empresas transnacionales, y manifestarse por enésima vez por las mismas demandas que han conmovido al mundo entero y que tienen en jaque la rapaz política entreguista del grupo salinista en el poder encabezada por el carnicero de Atenco Enrique Peña Nieto.
Sin embargo, el empecinamiento del grupo en el poder, producto de sus erráticas políticas, junto con los partidos que signaron el “pacto por México”, y en específico por esa cáfila de políticos carroñeros como Jesús Ortega, Carlos Navarrete, Ángel Eladio Aguirre Rivero junto con priistas, panistas, morenistas y demás, han puesto al estado mexicano en un predicamento, ciervo al mismo tiempo de los carteles internacionales financieros y de los cárteles cimarrones delincuenciales. Así, en lugar de que las famosas “reformas estructurales” de esta corporación delincuencial en el poder, traigan desarrollo y bienestar para la población, lo que ha generado es más pobreza y desdicha, y ha desnudado su verdadero rostro represor y de connivencia con el crimen organizado.
Lo que ocurrió en iguala, con los hechos trágicos de nuestros compañeros, las fosas clandestinas halladas con cadáveres de la guerra sucia de los años 70 y 80 del siglo pasado, que nos quieren falazmente hacer creer que son nuestros compañeros desaparecidos y así desmovilizarnos, apenas es la punta de la pirámide de impunidad y descomposición política que aún no termina y que la sociedad civil deberá cambiar radicalmente para que, con la devolución de nuestros compañeros, iniciara una nueva forma de ser del hombre nuevo para transformar la sociedad entera.
Exigencias:
– Justicia integral para los tres compañeros caídos en la ciudad de Iguala Gro.
– Presentación con vida de nuestros 43 compañeros desaparecidos.
– No permitamos la impunidad de los hechos sucedidos en la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre en la ciudad de iguala.
– Encarcelamiento a Ángel Heladio Aguirre Rivero y Felipe Flores Velázquez.
– Juicio político a Enrique Peña Nieto.