A LOS TRABAJADORES DEL GOBIERNO DEL DISTRITO FEDERAL,
AL PUEBLO EN GENERAL:
Desde el pasado 1º de mayo, en el marco de la lucha de los trabajadores contra las reformas a la Ley Federal del Trabajo, los trabajadores de la Asamblea General de los Trabajadores del GDF, instalamos una Huelga de Hambre, llevada a cabo inicialmente por los compañeros: Carlos Manuel González Cruz y Javier Castillo Martínez, despedidos por motivos políticos de Intendencia del Centro Histórico y de la Secretaria de Cultura, respectivamente.
Durante los diez primeros días de ayuno no se logró ni un ápice de atención de las autoridades de GDF, ya que fue hasta el 10 de mayo en que se tuvo el acercamiento con la Dirección General de Gobierno, misma que nos ofreció una reunión con Oficialía Mayor y la Dirección de Asuntos Políticos para el día 11, ya que el “día diez no es laborable”.
Efectivamente, el día 11 nos reunimos con el Subdirector de Asuntos políticos, Lic. Miguel Ángel Pantoja, el director de Seguridad e Higiene de la DGADP y finalmente se incorporó otro funcionario menor de la misma dependencia, todos ellos en completo desconocimiento de las demandas de la Huelga de Hambre y también estuvieron presentes los funcionarios que instrumentaron las bajas de nuestros dos compañeros huelguistas, quienes además inventaron las triquiñuelas mediante las cuales escudan las irregulares bajas. Ejemplo de lo anterior, es la manera en que se procedió para despojar de su empleo al compañero Javier Castillo Martínez.
Lo anterior lo afirmamos toda vez que las Condiciones Generales de Trabajo señalan:
CAPÍTULO XIV
DE LAS SANCIONES
Artículo 149.- No podrá aplicarse sanción alguna a los trabajadores, sin que se haya comprobado debidamente la infracción, por lo cual se elaborará acta por el superior inmediato, con intervención del Sindicato y la presencia del trabajador a quien se le atribuya la responsabilidad para los efectos que procedan. La inobservancia de los requisitos señalados será causa de nulidad. En los casos de cese o baja, además se deberá observar lo que dispone la parte final del Articulo 30 de estas Condiciones.
Como se desprende de la simple lectura de las CGT, el supuesto procedimiento para dictar una baja laboral al compañero Javier Castillo Martínez es a todas luces un despido político, por lo que tiene que ser resarcido con la reinstalación sin condición
Sin embargo no pudieron ocultar que la motivación real es que en ambos casos los compañeros se han destacado por defender las causas de sus compañeros de trabajo y por exigir mejoras laborales; sin embargo, esto no es suficiente para deshacer sus tropelías en contra de ambos trabajadores.
La cerrazón es la constante que desde cualquier oficina de gobierno se esgrime para obstaculizar la solución, se dicen estar preocupados pero hacen todo lo posible por que la Huelga de Hambre se prolongue mucho más tiempo, tal es el grado de insensibilidad política y poco sentido común.
Por todo esto insistimos en que la Huelga busca solo resarcir el mal que hacen estos funcionarios comandados por Marcelo Ebrard Casaubon, a quien le han endilgado el título nobiliario de “el mejor alcalde del mundo” (si este es el mejor, como será el peor), por ello seguimos demandando:
1. REINSTALACION INMEDIATA DE LOS TRABAJADORES DESPEDIDOS.
2. CAMBIAR EL RUMBO DE SU POLITICA LABORAL.
